A la espera de recibir de ustedes una ayuda que permita hacerle eco al reclamo que por medio de una carta realicé a la Secretaría de Movilidad hace algunas semanas, recurro al medio para contarles una situación que pone en peligro la integridad de las personas y la movilidad de la zona afectada.
Hace varias semanas, la Secretaría de Movilidad, convirtió la carrera 40, entre las calles 45 y 48 en una vía unidireccional con sentido sur-norte, para este fin pintaron las flechas sobre el pavimento, pero omitieron situar, al menos en los primeros días de este cambio, algunos guardas de tránsito que hicieran un trabajo pedagógico en la zona y luego controlarán el nuevo flujo en el sector.
Tal omisión trajo como consecuencia una permanente burla hacia las medidas de tránsito impuestas. Actualmente es continua la violación del sentido de la vía por parte de los motociclistas, taxistas, volqueteros, conductores de ambulancias y de vehículos particulares, quienes a cualquier hora del día o de la noche, recorren el trayecto en ambos sentidos, sin importarles la nueva adecuación. El agravante más importante, además del caos vehicular, es el que viven los peatones, quienes ingenuamente creyendo en las marcas del piso y en la seriedad del sentido unidireccional de la vía, cruzan sin verificar la presencia de contraventores, que más temprano que tarde van a originar un hecho lamentable.