Foto: Cortesía Escuela para la Inclusión
La Escuela para la Inclusión es un programa creado por la Alcaldía de Medellín para acoger a las personas con discapacidad, víctimas del conflicto armado, exhabitantes de calle, entre otras poblaciones especiales, para capacitarlas y vincularlas a un empleo.
La Escuela para la Inclusión liderada por la Secretaría de Inclusión Social, Familia y Derechos Humanos, empezó a funcionar desde el 13 julio de este año. En su primer mes se capacitaron 218 personas y se logró la vinculación laboral de ocho con discapacidad auditiva, las cuales trabajarán en una empresa de productos dentales. Existen otras 68 oportunidades laborales que serán ocupadas por las personas que actualmente se están capacitando, distribuidas así: 50 vacantes para una empresa de lavandería; diez para una empresa de vigilancia; siete para una empresa de productos de belleza; y una para cadena de almacenes de grand superficie.
“Me siento útil”
María Patricia Ruiz trabajaba anteriormente en una empresa de confecciones, pero, según cuenta, después de enfermarse nadie le volvió a dar trabajo. Tiene 52 años y ha sido diagnosticada con polimialgia reumática, discapacidad cognitiva, daño craneoencefálico y movilidad reducida.
María Patricia asiste a las capacitaciones de la Escuela para la Inclusión desde que inició el programa y describe su experiencia como algo muy positivo “allá hablamos muchísimo sobre quiénes somos, qué queremos y cuál es nuestro proyecto de vida. Además nos ayudan a entender que las adversidades hay que dejarlas atrás porque no nos podemos estancar. Las enfermedades son obstáculos, pero somos capaces de muchas cosas, como por ejemplo de trabajar y seguir luchando por nuestras familias”.
La orientación le ha servido mucho, hoy se siente motivada y con ganas de comenzar a trabajar. Actualmente espera obtener uno de los empleos gestionados por la Escuela. “Es una oportunidad maravillosa que nos están dando a los discapacitados, es muy difícil que hoy en día una empresa de la ciudad nos tenga en cuenta en sus procesos de selección. El trabajo es salud y saber que estoy ocupada en algo me hace sentir útil”.