Dos grandes excavaciones dificultan la movilidad en el barrio Boston y hacen parte de la actualización de su acueducto y alcantarillado. Vecinos se quejan de la poca información sobre el programa Centro Parrilla.
Por Carolina Pérez
La casa de Martha es equidistante de los dos grandes puntos de obras en Boston: la excavación de la calle Caracas y del Parque principal del barrio. Además, a un costado de su vivienda, pasa el último tramo al aire libre de la quebrada La Aguadita, una de las 15 que fluyen por la zona. Por eso, con la mirada de conocedora de su entorno, pero sin datos técnicos, es capaz de asegurar que justo ahora ella y sus vecinos están en el punto más crítico de incomodidad.
Hugo León López, director del proyecto Centro Parrilla, confirma la percepción de los habitantes. Explica que en este tradicional barrio confluyen cuatro contratos de obra civil, y ahora cuando comenzaron las excavaciones y los cierres viales, es cuando hay mayor intensidad en los trabajos, pero da un parte de tranquilidad: según él antes de finalizar el año, las obras estarán prácticamente terminadas.
“Estamos reponiendo 41 km de acueducto y 31 km de alcantarillado. Las obras tienen una inversión de 207 mil millones de pesos y van en un 58%”, Hugo León López, director Proyecto Centro Parrilla
Falta información
Pese a la incomodidad, el director explica que son obras necesarias para el saneamiento básico. Más en este sector, uno de los primeros en construirse en Medellín, en donde no se habían hecho obras de reposición del alcantarillado, una red que tiene una vida útil de 40 años en promedio, pero que en gran parte del sector, está intacta desde la fundación.
Los habitantes se quejan de la poca información. Algunos transeúntes dan ideas, sobre lo que escucharon y lo que creen que están haciendo las cuadrillas de obreros en las calles de su barrio. Álvaro Ochoa, por ejemplo, habla de la extensión de las redes de alcantarillado, por lo cual supone que se demoren en la construcción, otros mencionan de la recuperación de las quebradas: todos en alguna medida, tienen algo de razón.
Además de las incomodidades obvias, los comerciantes del Parque se quejan de los perjuicios económicos. Gonzalo Calle, quien tiene un local de comidas en el marco del parque principal, explica que con el cierre de la vía y de los andenes, disminuyeron los clientes y la productividad.
Saneamiento básico de las aguas
En diciembre, cuando empiece a funcionar la planta de tratamiento de aguas residuales del Norte, ubicada en el municipio de Bello, esas aguas serán llevadas hasta allá por medio de las redes que ahora están instalando, mediante tuneladoras y tecnología de punta que permite perforar la tierra por debajo de los cimientos de los edificios. Después de que sean tratadas, ahora sí volverán al Río Medellín, pero sin el perjuicio de la contaminación.
1.500 milímetros es el diámetro de la tubería que se está instalando para transportar las aguas desde el centro hasta la Planta de Bello.