Los comerciantes de las prenderías ubicadas en la carrera Bolívar, entre San Juan y Colombia se apoderaron de las aceras. Muchos de estos negocios sacan a la calle neveras, lavadoras y otros electrodomésticos, impidiendo el paso de los peatones.
No se entiende por qué la administración distrital permite ese uso indebido del espacio público, en vez de decomisar los electrodomésticos.