Por: Andrés Mauricio Tamayo.
¿Será que eso sí nos va a tocar? Se preguntan muchos de los que entre los 20 y 40 años están en empleos formales y cotizan a pensiones. Los más mayorcitos dan brazadas para alcanzar la meta y tener una edad dorada con el menor número de preocupaciones posible. Todos se refieren a la pensión que acompañará la vejez.
La incertidumbre tiene un papel importante en todo esto, en parte por las reglas de juego, que están cambiando, y en parte, porque nuestras sociedades globales están bajando natalidad y ganando longevidad. Entre 1960 y 2020 (míseros 60 años si se compara con la evolución humana), la expectativa de vida al nacer creció 21 años en el mundo según la firma Statista, al llegar a cerca de 73 años como promedio global. Y para 2050, países como Japón o Estados Unidos ponen el promedio de longevidad en 90 años. Incluso, se le atribuye al escritor Yuval Harari un pronóstico aterrador: no estamos lejos de vivir más de 100 años. Bueno, no todos ni en todas partes, pero la cifra estremece.
Esa realidad supone la existencia de sistemas robustos de prestación de servicios de salud y de modelos pensionales que garanticen ingresos por 25, 30 o más años a población que cotizó -o ahorró- por un período levemente superior a ello. “A mayor esperanza de vida tendremos que ahorrar un poco más y los sistemas de pensiones tienen que acompañar ese ahorro”, comenta Juan David Correa, presidente de Protección.
Vamos al punto en Colombia: hay nueva reforma pensional y si no hay objeciones constitucionales que están en revisión, entrará en vigor el 1 de julio de 2025. No aplicará para todos ya que hay régimen de transición para mujeres que ya hayan cotizado 750 semanas y hombres que ya estén por las Juan David Correa, presidente de Protección. 900 a la fecha mencionada, que en términos aproximados y suponiendo que estén cotizando desde los 25 años, serían mujeres de 40 y hombres de 44 o 45 años. Cada caso es distinto, vale aclarar.
Gracias a la conversación con el presidente de Protección, Juan David Correa, destacamos estos cambios fundamentales:
•Se incorpora un pilar solidario que aumenta en cerca de un millón de personas las beneficiarias de un subsidio de cerca de $ 223.000 (que hoy es de $80.000 en cifras redondas). Esto llega a adultos mayores muy vulnerables.
•Deja de ser una competencia entre dos sistemas (fondos privados que trabajan con ahorro y fondo público -Colpensiones- que trabaja con recursos de todos y otorga subsidios). “Los colombianos ya no tendrán que pensar si se van para un lado o para otro, sino que estarán en un sistema con las mismas reglas para todos”, explica el presidente de Protección.
•Hoy los subsidios están desenfocados porque los salarios más altos (menos de 10% del total), reciben mayor subsidio del sistema público (80% del total). Hoy se equilibra porque el subsidio llega hasta 2.3 salarios mínimos, es decir, igual para todos.
•Quienes ganen hasta 2.3 salarios mínimos, cotizarán en el fondo público. Cualquier peso devengado por encima de ello, será cotizado en cualquiera de los fondos privados o entidades habilitadas para ello. Hoy en Colombia, 85% de los trabajadores formales gana menos de 2.3 salarios mínimos al mes.
Los retos explicados por Protección
Si bien hay equidad en el hecho de que quien se gane hasta 2.3 salarios mínimos al mes o quien se gane 20 recibirán el mismo subsidio, hay una alerta con la sostenibilidad del sistema. Protección habla de un incremento de 67% en el pasivo pensional (la plata que el Estado tiene que poner para completar esas pensiones), pasivo que hoy ya es muy alto.
Estado y los actores del sistema deberán garantizar plataformas física, tecnológica y profesional, robustas y estables, para sostener la operación del nuevo modelo. En julio Colpensiones verá triplicado el número de afiliados a administrar.
¿La reforma pone en riesgo a los fondos privados o incluso los ahorros de los colombianos?
JDC: No hay riesgo para la sostenibilidad de los fondos y particularmente de Protección. Seguiremos administrando los ahorros existentes y entrantes, buscando alternativas de inversión rentables y acompañando a los colombianos con esquemas de ahorro para la construcción de futuro.
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