Parece que para las autoridades se volvió paisaje pasar por la carrera 46 con la calle 38 en el barrio San Diego, donde particulares se tomaron las aceras y las convirtieron en su bodega de tejas de PVC que se ven por montones acumuladas sin ningún control.
Estos elementos abarcan toda una cuadra y ocupan el espacio público que ya no está disponible para el tránsito peatonal, obligando a la personas a bajarse a la calle para poder pasar por allí.
Se requiere una atención urgente por parte de la subsecretaria de espacio público o la secretaria de movilidad para poner un alto a esta problemática.
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