Un palacio lleno de arte

Cuando uno llega a la entrada central del Palacio Nacional, ahí en Carabobo, se encuentra una gigantesca escultura metálica. Es una guitarra de unos tres metros y medio de altura elaborada por José Cirilo Henao, un artista plástico que, al momento de hacer esta entrevista en el quinto piso, parecía un trabajador más del montaje de las 45 galerías y 20 salas de exhibición con las que ahora cuenta esta edificación casi nonagenaria, que se ha convertido en la exhibición de arte más grande de la ciudad.

“Esta idea nació en la pandemia. Un día entré al Palacio y vi que los tres últimos pisos estaban desocupados y se me ocurrió la idea de montar una galería, o muchas galerías en los locales vacíos, que funcionaban mucho como bodegas. Hablé con los dueños del lugar (Sociedad Hacienda El Portal) y llegamos a un acuerdo. Ahora, este es un nuevo espacio para el arte, sobre todo, para la pintura, la escultura y el dibujo. Tienen cabida desde artistas reconocidos hasta las nuevas figuras de la plástica colombiana”, dice orgulloso de su obra José Cirilo.

Donde antes se juzgaba la conducta del ser humano, y desde donde muchas personas terminaron con su vida arrojándose desde la última planta (de ahí la expresión paisa “Me voy a tirar de un quinto piso” o “¿si le dicen que se tire de un quinto piso usted va y se tira?”)  hoy en día se evalúan miles de obras, se exhiben y se venden. Son alrededor de 1.500 piezas de arte en todos los formatos y técnicas, hasta instalaciones hay exhibidas.  

“Aseguramos que, por lo menos, va a haber 15 meses de exhibición y que la muestra se va a ir rotando para que siempre sea atractiva, eso fue lo que firmamos en el contrato. Contactamos artistas y galeristas que creyeron en este proyecto, muchos pagan con sus propias obras, porque usted sabe que el medio económico de muchos de ellos son sus propias creaciones”, dice José Cirilo. 

Artistas de postín    

Aparte de ver el montón de galerías y obras en un solo lugar, un hecho que llama de entrada la atención, aun para los menos avisados, es que hay piezas de artistas muy reconocidos, incluso mundialmente como Fernando Botero, del que se exhiben algunas esculturas en pequeño formato. También se ven obras de los maestros Rodrigo Arenas Betancourt, Salvador Arango, Enrique Grau, Omar Rayo, Edgar Negret, Belarmino Miranda y Jorge Botero Luján, entre otros. “Aquí hay obras para todos los presupuestos, desde dos millones de pesos hasta donde alcance el comprador. La idea es que se democratice el arte y llegue a más manos. Esta es una exhibición para toda la ciudad”. 

En un recorrido por los veinte locales convertidos en salas se aprecian esculturas de tamaño natural, piezas de las que solo se fundieron dos o tres ejemplares, reproducciones, obras de nuevos artistas, en fin, es un espacio de tres pisos en un lugar que ya de por sí, es una obra de arte. En una de las grandes salas, ubicadas en el quinto piso, se ve al Maestro Álvaro Daza en compañía de sus ayudantes acomodando una de las esculturas de su autoría.   

También se han programado exposiciones colectivas y se han considerado subastas para el disfrute de quienes gustan pujar por una obra. Artistas internacionales también tienen representación, con piezas de autores de Ecuador, Perú y México, entre otros países. Incluso, galeristas de Estados Unidos y algunos países de Europa ya pidieron espacio en el lugar. La voz se ha regado entre los corredores de arte y ya pusieron sus ojos, quién lo creyera, en este lugar, donde en las dos primeras plantas se consiguen todos los tipos de tenis que hay en el planeta y en las tres últimas hay un mundo completamente distinto.  

Cada una de las galerías ha puesto lo mejor de su repertorio, con obras de alto valor y representación en muchos casos, pero también con espacio para la nueva sangre de la plástica nacional. José Cirilo tiene muchos planes en compañía de la sociedad que regenta el Palacio Nacional. “La idea es que este lugar se convierta en un referente en el país, que existan incluso visitas guiadas, recorridos con historia, que los artistas nos puedan acompañar en algunos eventos, las subastas, en fin, todo lo que gire alrededor de la pintura, la escultura, lo nuevo, lo clásico”.  

Este es un supermercado de arte, un lugar de reunión para quienes tienen esa sensibilidad y ese amor por la plástica. Aquí hay obras muy representativas, valiosas, otras de artistas emergentes y en general, una gran galería de galerías para alimentar la pasión por los objetos más hermosos fabricados por el talento de artistas de todo el mundo.        

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