Por Carolina Perez R.
El balance va en aumento. De cuatro placas polideportivas que componían el equipamiento atlético en el Centro de Medellín, en el último cuatrienio se aumentó a seis. Ahora también hay gimnasios urbanos; dos canchas, una de fútbol y otra de micro; además de las dos piscinas públicas de La Asomadera. Sin embargo, la percepción de la mayoría de los habitantes de la Comuna 10, sigue siendo la misma: ¡Faltan más!
“Vivir en el centro tiene sus ventajas, pero también sus desventajas. Por ejemplo uno no puede hacer el plan con los amigos para irse a la cancha del barrio a jugar fútbol, tampoco hay gimnasios al aire libre cerca, si uno quiere hacer ejercicio o sacar los niños a jugar, toca pagar”, sentencia Juan Camilo Osorio, residente en un edificio cerca a la plazuela de San Ignacio.
La percepción de Camilo la comparten sus vecinos, sin embargo desde el Instituto de Deportes y Recreación, Inder, se expone otra mirada que evidencia la cantidad de escenarios y programas ofertados en La Candelaria. La explicación a este encuentro de puntos de vista, radica en que la oferta se concentra en la zona entre San Diego y La Asomadera y pocos en la zona central de la comuna 10.
Nada más en San diego hay una cancha de fútbol, una de microfútbol, dos placas polideportivas y el único gimnasio al aire libre de la comuna. En la Asomadera, muy cerca de allí, están las dos piscinas, una de ellas semiolímpica, en la que se ofertan cursos gratuitos para niños y jóvenes, también se concentra la oferta de los programas de Adrenalina (deportes extremos). Los demás están repartidos en Bomberos, muy cerca del Barrio El Salvador, La Minorista y el Chagualo, pero estos dos últimos no son utilizados. Explica Adiela Monroy, gestora de escenarios deportivos del Inder en la Comuna, que en el espacio de la Minorista hubo un daño hace algunos meses que deberá resolver Empresas Públicas de Medellín antes de ser reabierto, y en El Chagualo la unidad aún no se ha entregado oficialmente. Mientras pasa lo uno y lo otro, quienes estén en la zona deben desplazarse largos trayectos hasta donde sí hay servicio.
Monroy asegura que el contacto con los formadores es fácil, ninguno de los cursos que se ofertan en estos espacios tiene costo, solo es cuestión de contar con la disponibilidad de cupos para acceder a ellos.Entre todos los deportes, los semilleros de formación de fútbol siguen siendo los que más pide la comunidad, en especial en La Candelaria, pese a la demanda, la oferta sigue siendo poca.
La Cancha de Barrio Triste, el único respiro
El único espacio en servicio para el deporte en el sector del Sagrado Corazón, en donde se encuentran especialmente talleres mecánicos, es una placa polideportiva que instaló el Metro de Medellín. Esta es la única cancha pública en la que se puede practicar fútbol, microfútbol y baloncesto y es utilizada durante toda la semana por las entidades que ofertan programas para habitantes de calle, además se realizan dos torneos en los que juegan los empleados de las fábricas cercanas.