Los vehículos que suben por la calle 55 (Perú) buscando el parque de Boston, se encuentran con una esquina que arde y no propiamente por la panadería que hace años funciona en el cruce con la carrera 40: La Casa del Pan Caliente. De acuerdo con vecinos del sector, allí “todos los días” se presentan accidentes por falta de señalización, dejando muchas veces heridos entre los peatones, motociclistas y conductores de carros, busetas y camiones.
“Hace poco, un sábado, fueron cinco los choques. Hemos visto gente que sale volando, no nos ha tocado ver que mueran ahí, pero sabemos que fallecen luego en el hospital”, explicó Aidé Gaitán, quien vivió 15 años a media cuadra del cruce en un apartamento de su propiedad, el cual prefirió entregar en arriendo hace un par de meses para irse a un sector más tranquilo. A raíz de este caos, ella se dio al trabajo de presentar en junio del año pasado un derecho de petición respaldado por 738 firmas para exigir soluciones a la alcaldía.
En menos de dos semanas, doña Aidé recibió como contestación que se estudiaría el caso, pero solamente hasta la tercera semana de septiembre de 2016 le llegó una respuesta efectiva en forma de un boletín de prensa de la Secretaría de Movilidad. El cruce del Pan Caliente se incluyó dentro de una intervención integral, con señalización horizontal, vertical y semáforos, para cuatro puntos críticos desatendidos, dos de ellos ubicados en la comuna 10.
“Aquí hemos visto que vienen, toman medidas, cuentan los carros que pasan y nada. Hasta le ponemos la queja a los guardas que atienden los choques y nos dicen que pintemos nosotros si estamos tan preocupados”, aseguró agregando que las señales de pare en el piso no se repintan “hace 8 años” (la verdad es que ni se ven) y el único pare en lámina está mal ubicado, junto a un poste y a varios metros de la esquina. “El policía acostado tampoco sirve mucho porque los carros vienen bajando rápido de Villa Hermosa y como van por la carrera piensan que tienen la vía, pero no, la vía la llevan los que suben por Perú”, expresó.
Según reporte de la Secretaría de Movilidad de Medellín, cada mes se registran en toda la ciudad unos 4.000 accidentes de tránsito. Agosto fue uno de los más críticos con 4.256 casos y aunque los vecinos del Pan Caliente no lo crean, ese cruce no aparece entre los 20 más peligrosos. De ese triste escalafón, siete están en el centro y de esos, tres componen el top 10: glorieta de San Juan con Ferrocarril (primer puesto con 281 accidentes en 2015), San Juan con la Autopista Sur (tercero con 211 casos) y calle 49 (Ayacucho) con carrera 57 (Ferrocarril), que sería el décimo con 122 colisiones el año pasado.
El anuncio oficial:
El 20 de septiembre, la Secretaría de Movilidad afirmó que empezaba la instalación de cruces semafóricos en cuatro intersecciones donde se presentan riesgos por maniobras viales. Además del Pan Caliente, en Boston, los sitios en los que se instalarán los nuevos cruces semafóricos son la carrera 85 con calle 76 (Robledo), carrera 55 entre calles 94 y 95 (Zamora) y en la carrera 54 con calle 45 (Parque de Las Luces). Esta intervención costará $470 millones. Muy cerca de Boston, en el sector Ayacucho y en conjunto con el Metro de Medellín, el mismo despacho avanza en la instalación de ocho cruces semafóricos, para mejorar la movilidad y hacerla más segura en el sector aledaño al tranvía.