Luis Bernardo Vélez afirma que desde el Concejo de la ciudad prestan especial atención a que los indicadores del Plan de Desarrollo que apuntan a la reactivación económica sí se cumplan.
Por: Valentina Castaño Marín
El pasado 24 de agosto los diez alcaldes del Área Metropolitana presentaron el Plan de Reactivación Económica. “Ha llegado la hora de reabrir la economía“, afirmó el alcalde de Medellín, Daniel Quintero. Tres meses después, y tras el reciente incremento en el número de casos activos en la ciudad, el escenario vuelve a ser de incertidumbre.
El Presidente del Concejo de Medellín, Luis Bernardo Vélez, del movimiento Independientes, comenta sobre la posición del Concejo frente al tema de reactivación. Como organismo que discute y aprueba el presupuesto anual de rentas y gastos, insisten en que se debe hacer énfasis en materia de desarrollo económico en la ciudad, esto mediante estrategias como la exención de impuestos a comerciantes, el acompañamiento a venteros ambulantes y la realización de inversiones históricas de capital en el centro de Medellín.
¿Cómo articular el comercio informal a la reactivación económica?
LBV: La informalidad necesita organizarse. Hay que hacer un esfuerzo en recuperar el trabajo que se había hecho en formalizarla. Ellos (los comerciantes informales) tienen una preocupación hoy en materia de crédito, hay que destinar unos recursos que lleguen a estas personas, que les aumenten el capital para que puedan volver a tener su mercancía, es decir, para volver a alzarse. Debemos escuchar sus necesidades y apostar por ventas informales reguladas y ordenadas, que no representen un foco de contagio. Esta es una economía de miles de personas que se deterioró mucho, y si no se interviene, vendrán temas de violencia y seguridad en el centro de la ciudad.
¿Cómo pueden aportar todos los actores que conviven en el centro en esta dinámica?
LBV: Tanto la administración, el sector empresarial, las PYMES, emprendimientos y ventas informales, deben construir estrategias conjuntas. Sin embargo, creo que es el Estado quien debe desbordarse, todas las secretarías tienen que dirigir su atención a intervenir los problemas que hay en el centro. Generar programas en materia social, hacer un esfuerzo por organizar, dar crédito y acompañamiento a venteros informales y sus familias, la intervención tiene que aumentar mucho en acompañamiento psicosocial, de crédito y de desarrollo económico para que ellos puedan volver a hacer emprendimientos y generar empleos.
Muchas normas protegen a los informales, sin embargo, no pasa lo mismo con los comerciantes formales. ¿Cómo lograr un equilibrio?
LBV: No hay posibilidad de reactivación económica en el centro si ese sector formal no tiene una defensa desde la administración. Creo que el Estado, y no me refiero al Estado Municipal actual sino históricamente, ha descuidado al sector formal. No ha habido acompañamiento desde lo financiero, desde el crédito y, sobre todo, desde la defensa del espacio público. Yo no puedo, en aras de proteger un sector informal, descuidar el formal. Creo, personalmente, que ambas cosas se pueden hacer paralelamente si hay intervenciones diferenciadas para cada sector. Si bien la situación de desempleo, migración y otras problemáticas se reflejan con fuerza en el centro de la ciudad, no podemos abandonar el sector formal de la economía. Hay que apoyar con el tema de seguridad, el espacio público para ellos y exención de impuestos.
¿De qué manera puede la ciudad aportar a los comerciantes del centro?
LBV: Con campañas de compra local, la reducción del impuesto de industria y comercio y que se refleje en descuentos, con estrategias urbanísticas que favorezcan al comercio, por ejemplo, la peatonalización de vías. También pensar a futuro en la organización de eventos de ciudad que atraigan a ciudadanos de toda el área metropolitana.
La mayor preocupación de la ciudadanía cuando se habla de reactivación es quizá el aumento en el número de casos positivos para COVID-19 en la ciudad. Hasta el martes 10 de noviembre, 186.183 personas -94.022 mujeres y 92.161 hombres- habían sido diagnosticadas con la enfermedad en Antioquia. La cifra fue entregada por la Gobernación en su boletín diario, en el que también se precisó que 1.630 nuevos contagios fueron detectados en esas últimas 24 horas.
¿Cómo cree que se pueda lograr disciplina social para que se cumplan los protocolos de bioseguridad en el centro y así evitar cierres de comercio o contagios?
LBV: Yo pienso que esta pandemia es una sin precedentes, esto implica que muchas cosas vayan cambiando con las eventualidades que se presentan. Es decir, hace tres meses pensamos que habíamos superado el pico, sin embargo, hoy tenemos una reactivación del virus. Esta no es una pregunta fácil, pero creo que la prioridad más grande debe ser que todos entendamos que tiene que haber un asunto de autocuidado. La oferta del Estado en cuanto al sector salud, hoy es insuficiente, no podemos enfrentar la situación en las UCIs si no hay disciplina social y consciencia. Si las personas conocen el beneficio de cuidarse lo harán sin que se impongan sanciones, sin embargo, si estas estrategias no logran impactar a toda la población, es necesario que las autoridades impongan comparendos.
entrevistPor último, cabe destacar que en su misión por impulsar y crear políticas públicas y otros mecanismos que ayuden a reactivar la economía, el Concejo de Medellín está adelantando acciones como el estudio del proyecto de acuerdo de compras públicas, sostenibles y socialmente responsables, próximo a aprobarse. En este se propone enfocar la promoción de empleo en grupos poblacionales históricamente excluidos y con mayores niveles de desempleo: jóvenes, mujeres, población LGBTIQ, pos penados, víctimas del conflicto armado, ex habitantes de calle, entre otros. También la creación de la mesa de diálogo con el sector empresarial bajo el liderazgo del Concejo Municipal.